En su incansable e incontable búsqueda de nuevas estéticas,
Barbie decide vestirse, peinarse y complementarse según los personajes de La Bella y la Bestia de
Disney. Cogiendo el peinado de ese, los ojos de aquel y los calcetines del otro,
Barbie se inventa un look que, como de costumbre, le queda de maravilla.