Destruir es
divertido. Tu lo sabes y nosotros lo sabemos. Por eso este juego es tan adictivo. Un juego en el que dispones de un
cañón. Y justo delante, diferentes estructuras construidas a base de numerosas piezas que tendrás que derribar por completo lanzando proyectiles. El placer que obtendrás no tiene precio. Pruébalo.