Anna va a cometer un gran error, dejar que su novio la maquille. Naturalmente, como varón, no atinará demasiado y el resultado quedará lejos de ser convincente. Y aquí es donde entras tu, con una misión clara: Devolver la
belleza a nuestra protagonista aplicando el
maquillaje con gracia, buen gusto y talento. Puede que
Elsa tu ayude, pero no se lo digas a nadie.