Esta
bola de espejos aficionada al salto vive para la
música disco y las
plataformas. De hecho, le encanta recorrerlas saltando de una a otra y acumulando estrellas mientras por los altavoces suena lo mejor del disco-funky. Pero tendrá que ir con cuidado porque con tanto
baile y conteneo podría caer. Atención al oso Travolta.