Eres un pistolero que se bate a duelo con sus enemigos. Pero no de golpe, sino uno por uno y a medida que asciendes un piso tras otro. Cuando llegues tendrás que calcular bien la dirección de la
bala antes de apretar el gatillo. Los aciertos en la cabeza valen más puntos. Pero atina bien o serás tu el que termine acribillado.