Ser la Reina del Hielo tiene sus inconvenientes, una puede tener más tendencia a resbalar, caer y romperse algún hueso. Inevitablemente acabarás en el
hospital, donde te curarán y te dejarán como nueva. Lo siguiente es
buscar el consuelo eligiendo un nuevo
vestido y un peinado radiante para lucir por las heladas calles de tu reino.