Ahora que los niños disfrutan cazando Pokeymans con el movil, a este abuelo inquieto le apetece probar de qué demonios va todo eso. Así que se arma con un teléfono y recorre el parque a la
caza de Pokeymans. Ayúdale a acumular el mayor número posible de ellos para demostrar a las nuevas generaciones que ser anciano también es cool.