Tu misión consiste en
destruir torres de colores. Para lograrlo dispones de un balón negro que deberás estrellar contra los
bloques de un solo color. Puedes hacerlo piso por piso, o aprovechar cuando varios
bloques se ponen en línea y lanzarte como un kamikaze. Pero no será tan fácil, los
bloques negros pueden estropearte la diversión y obligarte a comenzar el juego de nuevo.